Las autoridades de Miami-Dade arrestaron a un cubano al que acusan de atropellar mortalmente a un joven colombiano de 18 años y huir de la escena.
El incidente ocurrió el pasado 15 de julio sobre la 1:15 de la madrugada. La víctima, llamada Kevin Daniel Chaparro, iba en su bicicleta por la cuadra 3200 y la avenida 127 del suroeste, en el área no incorporada de Tamiami, cuando un Jeep Wrangler, al parecer a exceso de velocidad, lo golpeó por detrás y lo dejó tirado en el lugar.
El adolescente había llegado al país tres meses antes con una beca de fútbol que le otorgó la Universidad Millennia Atlantic.
La noche de su muerte, regresaba a su casa de un centro comercial de Miami, adonde fue a ver el partido de la final de la Copa América entre Colombia y Argentina.
La Policía dijo que tras una investigación, se identificó a Yoandrys Alfredo García-García, cubano de 40 años y residente en el oeste del condado, como el autor del crimen.
García-García, quien lleva siete años en Estados Unidos, acudió el miércoles a la sede del Departamento Policial de Miami-Dade con su abogado y “proporcionó una confesión completa”, según Local 10.
Fue detenido e imputado por cargos de abandonar la escena de un accidente causando la muerte e intento de manipulación de pruebas.
Lo trasladaron al Centro Correccional Turner Guilford Knight (TDK) y le impusieron una fianza de 20,000 dólares. Si la paga y sale en libertad provisional, estará obligado a cumplir un toque de queda nocturno y no podrá conducir.
Por otra parte, los padres de Chaparro, quien era hijo único, abrieron una cuenta en la plataforma GoFundMe para recaudar dinero para poder viajar a Florida a recoger el cuerpo de su hijo y llevarlo a Colombia.
“Kevin Daniel se crio en Colombia, pero nació en Miami, Florida. Desde pequeño, su sueño era volver a su lugar de nacimiento para estudiar y echar raíces en lo que él llamaba ‘su hogar’. A los 18 años, Kevin se embarcó en la mayor aventura de su vida. Trabajó duro para sacar excelentes notas en el instituto, se convirtió en un gran jugador de fútbol (soccer) y ganó múltiples torneos”, dice la solicitud.
“Sus esfuerzos le valieron una beca para empezar sus estudios en Miami el próximo septiembre. Comenzó su viaje el 29 de marzo de 2024, trabajando a tiempo completo, pagando el alquiler y ahorrando dinero para mantenerse mientras vivía en Miami. Después de solo tres meses estaba prosperando”, agrega el texto.
La noche de su muerte, estuvo en contacto permanente con sus padres. Cuando terminó el partido, llamó a su padre a Colombia y le dijo que se iba a su casa, situada en Kendall, y lo llamaría cuando llegara. Pero la familia nunca recibió esa llamada.
Su padre Oscar le pidió a un amigo que fuera hasta donde vivía Kevin para ver qué había pasado. Al poco rato de llegar, la Policía se presentó con la noticia de su muerte.
El atribulado padre solicitó a la comunidad colaboración para identificar al culpable.
“A nosotros no nos entregan el cuerpo, porque al haberse fugado el conductor es un homicidio, y el cuerpo lo tienen retenido hasta que avance la investigación”, explicó.
“Mi hijo era un crack, un hijo de Dios, hincha de Millonarios, del Real Madrid, quería jugar allí y en la selección de Estados Unidos”, agregó.
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