Las autoridades de Finlandia anunciaron este viernes que están investigando una posible violación de sus aguas territoriales al sur de la ciudad portuaria de Hamina por parte de un buque de la flota rusa del mar Báltico. Este incidente se produce en un contexto de tensiones crecientes en la región, coincidiendo con una nueva interceptación de aviones británicos con un caza ruso SU-27 sobre el mar Negro, el tercer episodio de este tipo con aeronaves de la OTAN en una semana.
La Guardia Fronteriza finlandesa abrió una investigación sobre el hecho que involucra al barco de investigación ‘Mijail Kazanski’, utilizado por la Armada rusa para explorar el fondo marino. Según informó la radiotelevisión pública YLE, la embarcación recorrió aproximadamente 1,2 millas náuticas (más de dos kilómetros) en aguas territoriales de este país integrante de la OTAN que comparte una frontera terrestre de 1.340 kilómetros con Rusia.
Una patrulla de la Guardia Fronteriza escoltó al buque ruso después de que los sistemas de vigilancia lo detectaran y no respondiera a las llamadas de radio. El Ministerio de Defensa en Helsinki señaló en un comunicado que la última violación territorial se produjo el pasado 10 de junio, cuando cuatro aviones rusos atravesaron el espacio aéreo finlandés frente a las costas de Loviisa y Porvoo.
Por otro lado, Moscú informó que un caza ruso Su-27 interceptó este viernes un avión espía y dos cazas británicos sobre el mar Negro, que cambiaron de rumbo tras el acercamiento de la aeronave rusa.
“Un caza Su-27 de la defensa antiaérea rusa alzó el vuelo para evitar una violación de la frontera estatal de Rusia. La tripulación identificó los objetivos aéreos como un avión espía y de lucha radioelectrónica RC-135 y dos cazas polivalentes Typhoon de la Fuerza Aérea de Reino Unido”, informó el Ministerio de Defensa ruso. “Ante la cercanía del caza ruso los aviones militares extranjeros cambiaron de rumbo, se alejaron de la frontera de Rusia”, según ese departamento.
“El avión ruso volvió a la su base. No se permitió la violación de la frontera estatal de Rusia”, añadió el ministerio en Moscú, y recalcó que el vuelo del caza se realizó respetando estrictamente las normas internacionales para el uso del espacio aéreo sobre aguas neutrales y respetando las medidas de seguridad.
Se trata del segundo incidente de este tipo en tres días con participación de un avión espía británico RC-135 y dos cazas Tyfon sobre el mar Negro, tras el ocurrido el pasado miércoles. Y este fin de semana cazas rusos interceptaron dos bombarderos estadounidenses B-52H sobre las aguas del mar de Barents, con lo que suman tres incidentes con participación de aeronaves de la OTAN en las cercanías de Rusia en apenas una semana.
(Con información de AP, EFE y EP)
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