El expresidente de Estados Unidos Donald Trump (2017-2021) aterrizó este domingo (14.07.2024) en Milwaukee, en el estado de Wisconsin, para asistir a la Convención Nacional Republicana, casi 24 horas después del fallido intento de asesinato en el que resultó herido, publicó en redes su hijo Eric Trump.
“Aterrizaje en Milwaukee con @realdonaldtrump”, dijo Eric en la red X junto con un video asomándose a la cabina mientras los pilotos aterrizaban el avión del candidato presidencial republicano, apodado “Trump Force One”.
El exmandatario había indicado en su red Truth Social antes de despegar que lo sucedido le hizo plantearse retrasar dos días su llegada al evento, pero luego decidió que no podía permitir que un “tirador o potencial asesino” cambiara su agenda.
El sábado 13 de julio tanto el Partido Republicano como la campaña de Trump indicaron que la convención prevista desde este lunes 15 de julio y hasta el jueves 18 de julio en Milwaukee seguía adelante, y añadieron que el magnate neoyorquino, de 78 años, estaba deseando estar en la misma.
“¡Soy Donald J. Trump y NUNCA ME RENDIRÉ! Siempre os querré por haberme apoyado. Unidad. Paz. Hagamos Estados Unidos grande de nuevo”, dijo en un email enviado por su campaña, acompañado de una foto ya icónica, la que lo muestra con el puño en alto mientras su equipo de seguridad lo evacuó del escenario tras el atentado.
Trump se encontraba dando un mitin en Butler (Pensilvania) el sábado cuando fue alcanzado por una bala en la oreja derecha. Una persona murió, dos resultaron heridas y el agresor, que disparó desde fuera del recinto, fue abatido por la Policía.
Milwaukee se encuentra ya blindada ante la llegada del expresidente y la celebración de la convención, con el centro de la ciudad cerrado al tráfico y numerosa presencia policial y vallas en torno al centro de congresos, donde se espera la presencia de 15.000 delegados del Partido Republicano procedentes de los 50 estados del país.
“Este es probablemente una de las zonas más seguras en la faz de la tierra ahora mismo”, dijo a la prensa el presidente del Partido Republicano en Wisconsin, Brian Schimming, para tranquilizar a los cientos de delegados republicanos que han ido llegando durante todo el día para el gran evento de partido.
Crooks actuó solo y usó rifle semiautomático
El FBI estima que Thomas Matthew Crooks, el joven de 20 años autor del ataque del sábado 13 de julio contra el expresidente actuó solo y que los primeros indicios no dan pistas de que pertenezca a alguna organización terrorista internacional.
“En este momento, la información que tenemos indica que el tirador actuó solo y que actualmente no hay preocupaciones de seguridad pública”, dijo en una teleconferencia Kevin P. Rojek, el agente del FBI que dirige la investigación.
El agente agregó que por el momento tampoco se ha identificado “una ideología asociada con el sujeto”, quien efectivamente, como se informó previamente, usó un rifle semiautomático que fue comprado por su padre, aunque no queda claro si tomó el arma con permiso de su progenitor o no.
Los investigadores agregaron que por el momento estudian el hecho como un caso de “terrorismo doméstico”, y que han mandado el arma y el teléfono celular de Crooks a un laboratorio del FBI en Virginia.
Añadieron que las publicaciones en redes sociales y textos hechos por el joven y que han sido revisados hasta el momento por los efectivos policiales no revelaban ninguna ideología política, ni tampoco se han descubierto antecedentes de algún tipo de enfermedad mental.
Rojek agregó que la agencia federal no tenía conocimiento de que se hubiera registrado algún tipo de confrontación entre Crooks y los agentes policiales locales previo al ataque.
mg (efe, afp)
Tiroteo en mitin de Trump, en imágenes
Un atentado contra el candidato en un acto de campaña en Pensilvania causó conmoción en Estados Unidos y el mundo.
Imagen: Brendan McDermid/REUTERS
Una serie de disparos sonaron durante el mitin de campaña presidencial de Donald Trump en Butler, Pensilvania. Los agentes del Servicio Secreto rápidamente subieron al escenario y rodearon a Trump, a quien cubrieron en el suelo de la tribuna.
Imagen: Gene J. Puskar/AP Photos/picture alliance
El Servicio Secreto entra en escena
En el momento en que sonaron los disparos, se pudo ver a Trump tocándose la oreja derecha. Luego, agentes del Servicio Secreto corrieron al escenario y derribaron al expresidente. Se apiñaron en torno a él, mientras otros agentes de seguridad aseguraban el lugar.
Imagen: Evan Vucci/AP Photos/picture alliance
Donald Trump recibió un impacto en la oreja derecha
Después de rodear a Trump, los agentes del Servicio Secreto ayudaron al expresidente a ponerse en pie. Se podían ver hilos de sangre manchando su rostro. Trump elevó el puño hacia la multitud y articuló “peleen, peleen, peleen”. Muchos entre la multitud corearon “USA, USA”.
Imagen: REUTERS
Trump adopta una pose desafiante
Después de que los agentes del Servicio Secreto lo ayudaran a ponerse en pie, Trump levantó el puño en el aire en un gesto desafiante, quedando parcialmente al descubierto y con visibles manchas de sangre en la cara. Las imágenes del momento, con la bandera estadounidense de fondo, circularon rápidamente en las redes sociales. Muchos republicanos lo vieron como un momento decisivo para su campaña.
Imagen: Evan Vucci/AP Photo/picture alliance
Escenario del crimen: mitin al aire libre en Pensilvania
El expresidente estadounidense acababa de comenzar su discurso cuando se escucharon los disparos. Trump había estado hablando de inmigrantes. Un testigo dijo a la agencia de noticias Reuters que al principio sonaron como fuegos artificiales, pero luego la gente empezó a gritar. “Todo el mundo empezó a entrar en pánico. Era un caos”, relató.
Imagen: Evan Vucci/AP Photo/picture alliance
Conmoción y miedo entre la multitud en el mitin
Entre el público asistente, inicialmente tres personas resultaron gravemente heridas. Un médico presente se apresuró a ayudar a uno de los heridos. En declaraciones a los periodistas después, el médico dijo que la persona había recibido un disparo en la cabeza. Posteriormente se confirmó su muerte.
Imagen: Brendan McDermid/REUTERS
Conmoción también alrededor del mundo
La noticia de lo que el FBI llama un “intento de asesinato” fue noticia en todo el mundo. El presidente Joe Biden dijo que estaba aliviado de que Trump estuviera a salvo y condenó el ataque diciendo que “no hay sitio en Estados Unidos para este tipo de violencia”. La vicepresidenta Kamala Harris, que también estaba haciendo campaña en Pensilvania, condenó el “abominable acto”.
Imagen: Brian Snyder/REUTERS
Joe Biden condena el atentado contra la vida de Trump
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, regresó a Washington desde su casa en la playa, en Delaware, y también habló con Trump después de su alta del hospital. Biden dijo que estaba agradecido con el Servicio Secreto por poner a Trump a salvo. “Es enfermizo. Es enfermizo. Es una de las razones por las que tenemos que unir este país”, escribió Biden en la red social X.
Imagen: Tom Brenner/REUTERS
Despliegue policial: más seguridad para los candidatos
Agentes de policía de Rehoboth Beach, en Delaware, custodian el ayuntamiento donde el presidente Biden realizó su comparecencia. En su discurso, condenó el ataque a su probable rival republicano en las próximas elecciones presidenciales de noviembre.
Imagen: Tom Brenner/REUTERS
Varias horas después del tiroteo, el FBI asumió la investigación. Desde entonces, el organismo confirmó un “intento de asesinato” contra Trump y anunció que había identificado al tirador. El agente especial Kevin Rojek dijo que los funcionarios estaban “trabajando febrilmente” en el caso. El FBI dijo que no tenía “ninguna razón” para creer que existiera alguna amenaza adicional.
Imagen: Brendan McDermid/REUTERS
Seguridad extra para Trump
La policía de Nueva York montó guardia frente a la Torre Trump en Nueva York. Después de salir del hospital, se esperaba que el exmandatario pasara la noche en su casa de Nueva Jersey, indicó el diario “New York Times”.
Imagen: David Dee Delgado/REUTERS
El intento de asesinato más grave desde 1981
Miembros del Servicio Secreto patrullaron la zona tras el mitin de Trump en Pensilvania, interrumpido por el atentado. El ataque es el intento más grave de asesinar a un presidente o candidato presidencial desde 1981, cuando le dispararon a Ronald Reagan.