Llega la final de la Eurocopa, un torneo en el que España ha brillado y consolidó paso a paso su favoritismo con buen juego. Su rival es Inglaterra, un equipo que sorprendió a muchos y que si bien comenzó como un candidato en el camino, dejó dudas, pero avanzó con eficacia hasta llegar a la última instancia y acalló críticas.
Es el enfrentamiento de un seleccionado español cargado de individualidades y buen juego colectivo, con un joven Lamine Yamal superlativo (líder de asistencias en la Euro, con 3) y figuras como Dani Olmo (uno de los goleadores del torneo con 3 tantos), Fabián Ruiz, Nico Williams y Rodri. Es un equipo ofensivo y rápido, con pases precisos y de juego en toda la cancha. El equipo de Luis de la Fuente es favorito y no hay duda de ello. España además recupera a Dani Carvajal y a Le Normand para la final.
España no ha perdido en 9 partidos y ha ganado sus últimos ocho encuentros.
Del otro lado está el equipo dirigido por Gareth Southgate, un técnico que apunta a la efectividad más que al juego llamativo. Inglaterra en este torneo ha sido criticado de aburrido, de poco creativo. Pero lo cierto es que Southgate no ha perdido ningún partido en los 90 minutos en la Eurocopa dirigiendo a los ingleses (la final de 2020 fue empate, perdieron por penaltis). Inglaterra sabe presionar y le gusta tener posesión. Y Southgate sabe leer los partidos: en la semifinal dos de sus cambios determinaron el triunfo. Además, Harry Kane, también con 3 goles, ha sabido brillar cuando el equipo lo ha necesitado.
Inglaterra no ha perdido en 6 partidos.
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