MIAMI.- Donald Trump se distanció en las últimas horas del Proyecto 2025, una propuesta de restructuración masiva del gobierno redactada por aliados y exfuncionarios, días después de que el jefe del think tank que elaboró el programa sugiriera que habría una “segunda revolución estadounidense”.

“No sé nada sobre el Proyecto 2025″, publicó Trump en sus redes sociales. “No tengo ni idea de quién está detrás. No estoy de acuerdo con algunas de las cosas que dicen y algunas de las cosas que dicen son absolutamente ridículas y abismales. Todo lo que hagan, les deseo suerte, pero no tengo nada que ver con ellos”.

El plan de 922 páginas esboza una dramática expansión del poder presidencial y un plan para despedir hasta 50.000 trabajadores del gobierno para reemplazarlos con leales a Trump. La campaña de reelección del presidente Joe Biden viene tratando de llamar más la atención sobre el programa, sobre todo porque Biden intenta mantener unidas las filas de los demócratas tras su desastroso debate.

Trump saluda a sus seguidores en un acto de campaña Foto Instagram @realdonaldtrump

Trump ha esbozado sus propios planes para rehacer el gobierno si gana un segundo mandato, incluyendo la activación del mayor operativo de deportación en la historia de Estados Unidos, y la imposición de aranceles sobre potencialmente todas las importaciones. Su campaña advirtió al mismo tiempo a sus aliados externos que no presuman de hablar en nombre del expresidente.

El presidente de la Fundación Heritage, Kevin Roberts, dijo esta semana en el podcast “War Room”, del estratega conservador Steve Bannon, que los republicanos están “en el proceso de recuperar este país”. “Estamos en el proceso de la segunda revolución americana, que seguirá siendo incruenta si la izquierda lo permite”, sentenció.

El excongresista Dave Brat fue el anfitrión del programa de Bannon, que cumple una condena de cuatro meses de prisión vinculada a la salvaje toma del Capitolio del 6 de enero de 2021 por seguidores de Trump. Esos comentarios fueron ampliamente difundidos en Internet y criticados por la campaña de Biden, que emitió un comunicado diciendo que Trump y sus aliados estaban “soñando con una revolución violenta para destruir la idea misma de Estados Unidos”.

Algunas de las personas que participan en el Proyecto 2025 son antiguos altos funcionarios de gobierno. El director del proyecto, Paul Dans, fue jefe de personal en la Oficina de Administración de Personal de Estados Unidos bajo Trump. La vocera de la campaña de Trump, Karoline Leavitt, apareció en uno de los videos del Proyecto 2025.

John McEntee, exdirector de la Oficina de Personal Presidencial de la Casa Blanca, es un asesor principal. McEntee dijo al sitio de noticias conservador The Daily Wire a principios de año que el equipo del Proyecto 2025 integraría gran parte de su trabajo con la campaña después del verano boreal, cuando Trump anuncie su equipo de transición.

Los comentarios de Trump tomando distancia del Proyecto 2025 se producen antes de las reuniones que el Partido Republicano celebrará la semana próxima para empezar a redactar su plataforma de partido.

Donald Trump y Joe Biden durante el reciente debate presidencial Foto Facebook CNN

Un vocero del plan dijo que el Proyecto 2025 no está vinculado a un candidato o campaña específicos. “Somos una coalición de más de 110 grupos conservadores que abogan por recomendaciones políticas y de personal para el próximo presidente conservador”, señaló en un comunicado. “Pero depende en última instancia de ese presidente, que creemos que será el presidente Trump, decidir qué recomendaciones poner en práctica”, agregó.

El Comité Nacional Demócrata dijo por su parte que el plan y la campaña de Trump son parte de la misma “operación MAGA” (por las siglas de Make America Great Again). Un vocero de la campaña de Biden, Ammar Moussa, dijo que miembros del personal del Proyecto 2025 también dirigen la plataforma política republicana. “El Proyecto 2025 es la política extrema y el libro de jugadas del personal para el segundo mandato de Trump que debería asustar al pueblo norteamericano”, dijo Moussa.

La decisión de Trump de marcar distancias con el proyecto podría reflejar en parte un esfuerzo por moderar su mensaje en los últimos meses de la carrera presidencial, dijo James Wallner, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de Clemson. “Trump está básicamente buscando ahora apelar a una audiencia más amplia”, dijo Wallner.

Agencias AP y Reuters

LA NACION

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