Dentro de la extensa gama de enfermedades que afectan a los humanos, las parasitosis intestinales están a la orden del día (y más en esta temporada de calor por la que estamos pasando), debido principalmente a los hábitos alimenticios de la población en los países en vías de desarrollo. Claro está que las parasitosis no son exclusivas de esta población, y afectan a miles de personas en todo el mundo.

Una de las más importantes que podemos encontrar, es la parasitosis ocasionada por los platelmintos Taenia solium o Taenia saginata, gusanos planos que, en su fase adulta, viven en el intestino delgado de los humanos y que son conocidos popularmente como “lombrices solitarias” (esto nombre deriva del hecho de que, debido al tamaño que pueden alcanzar, solo es posible que un ejemplar viva en el intestino).

El ciclo biológico del parásito es complejo, y dependiendo de su fase (adulta o larvaria) será el tipo de enfermedad que ocasione en los humanos. Las fases larvarias son conocidas como cisticercos y las enfermedades que ocasionan son las llamadas cisticercosis, muy peligrosas y pueden provocar la muerte del afectado (solo las larvas de T. solium). Las fases adultas son las Taenias, se alojan en el intestino delgado y la enfermedad producida es conocida como teniasis. Para que se produzca una teniasis, un humano debe ingerir alimentos contaminados con fases larvarias de Taenia, que podemos encontrar en alimentos cárnicos mal cocinados.

La teniasis tiene una amplia distribución geográfica, pero la mayoría de casos se centran en países en vías de desarrollo y en zonas rurales, debido a las condiciones de poca higiene a las que se someten los animales destinados para el consumo humano. Esta enfermedad es de importancia, ya que la Taenia se alimenta de los nutrientes presentes en los alimentos que son ingeridos por su hospedero, ocasionándole un cuadro severo de desnutrición que, de no atenderse, puede provocarle serios problemas de salud.

Ciclo Biológico de la Taenia solium. Crédito: CDC

¿Cuáles son los síntomas?

De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de las Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), los síntomas que pueden aparecer por esta parasitosis son:

  • Náuseas.
  • Diarrea
  • Dolor abdominal
  • Pérdida de peso involuntaria o del apetito.
  • Eliminación de proglótidos (segmentos de la tenia) a través de las heces

El diagnóstico confirmatorio se hace a través del análisis de muestras de heces, donde se verifica la presencia de segmentos del gusano, o bien los huevos del mismo. En caso de encontrarse estas estructuras, el médico recetará los antiparasitarios correspondientes para eliminar al parásito.

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By Diario

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