Con el objetivo de realizar un seguimiento detallado de la gestión de Javier Milei, la Fundación Pensar, presidida por la diputada de Pro María Eugenia Vidal, lanzó hoy un primer informe en el que señala los aciertos y los déficits de estos primeros seis meses de mandato libertario.
“Argentina vive un tiempo particular. La gran apuesta del Gobierno, que se propone hacer cosas diferentes a todas las que fueron hechas antes, es también la apuesta que la mayoría de los argentinos eligió hacer en noviembre de 2023, tras el evidente agotamiento del modelo kirchnerista. Los meses transcurridos desde la asunción del Presidente nos plantean más interrogantes que certezas”, sintetiza el informe de 39 páginas que elaboró la fundación, el principal think tank del partido que preside por Mauricio Macri.
“Es lógico que haya más interrogantes que certezas, apenas pasaron seis meses de gestión”, explicó luego la diputada Vidal en declaraciones a LN+. La legisladora enfatizó que “el rumbo adoptado por el Gobierno es el correcto” y que su partido continuará acompañando al Presidente. “En este momento de la Argentina no vamos a especular”, dijo.
El lanzamiento del índice coincide con la estrategia trazada en las filas de Macri, donde durante meses advirtieron que iban a esperar a que el Gobierno lograra sancionar la Ley Bases y el paquete fiscal antes de comenzar a marcar distancias con la gestión libertaria.
Con el propósito de medir, de manera objetiva, cómo evoluciona la gestión, la Fundación Pensar elaboró un “Índice de Desarrollo Nacional” (IDC), conformado a partir de una ponderación de 50 indicadores diferentes, el cual será actualizado de manera mensual. “Este índice será un valioso aporte para medir de manera precisa cómo las medidas de gobierno y la coyuntura nos acercan o nos alejan de la senda del progreso y el desarrollo”, se exalta en el informe.
En esta primera medición, el IDC fue del 2,9 que, en la escala de desarrollo que elaboró la Fundación Pensar, se ubica en el nivel “bajo”, básicamente por efecto de las variables económicas y sociales negativas heredadas del gobierno anterior. Según esta escala, entre 0 y 2, el nivel es “muy bajo”; entre 2 y 4, “bajo”; entre 4 y 6, “medio” y entre 6 y 10, “alto”. Según se explica en el informe, las variables están agrupadas en diez categorías y ponderan distintos indicadores tanto económicos como sociales y políticos.
En el arranque del informe, la Fundación Pensar repasa la “pesada herencia” que recibió el presidente Milei del gobierno de Alberto Fernández, Cristina Kirchner y Sergio Massa. Enumera ocho indicadores macroeconómicos negativos de la administración kirchnerista, centrados en el alto número de pobreza, la inflación acumulada, la caída en las jubilaciones, la situación frágil de las reservas del Banco Central y el déficit fiscal y comercial.
Como gran acierto de la gestión libertaria, el documento destaca que la economía comienza a ordenarse con la consolidación del déficit fiscal cero, “con los mejores números desde 2008″. Asimismo, exalta los avances en la baja de la inflación, “con el menor registro en 28 meses”.
También destaca que “el riesgo país alcanzó un piso de 1148 puntos, el valor más bajo desde 2020, aunque aún por encima del piso de 342 puntos en 2017″, segundo año de la gestión macrista. Asimismo, enfatiza que las reservas alcanzaron los US$30.000 millones por primera vez en 12 meses”.
Acto seguido, sin embargo, el informe admite que este ordenamiento fiscal “duele”. “La actividad y el empleo siguen cayendo y aún no logran recuperarse”, advierte, al tiempo que señala que “los ingresos no logran ganarle a la inflación acumulada y arrastra al consumo”
En esa línea, explica que “la Argentina entró en recesión técnica en el primer trimestre y la actividad registró su mayor caída desde 2020″. “Los mayores detractores del indicador son la caída trimestral en el producto, el aumento de la desocupación y la pobreza. Contribuyen de manera negativa la elevada brecha cambiaria, la caída en el consumo y el estancamiento en los resultados de calidad educativa”, advierte.
El informe plantea que “si bien los salarios empezaron a acercarse a la inflación, aún acumulan pérdidas respecto al inicio de la gestión”, y precisan que un 51% no llega a fin de mes”. Respecto de la situación laboral, alerta que “se alcanzaron siete meses en baja, la mayor desde 2002. Es el nivel de desempleo más alto desde 2021. En 2024 ya se perdieron 600.519 empleos (43.693 privados, 70.509 públicos)”.
“La demanda laboral es la más baja en 10 años Argentina registra la peor expectativa en el mundo de generación de trabajo”, alerta e indica que un 41% de la población “tiene miedo de perder el empleo”.
LA NACION
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