Así es el mantenimiento que se le hace al cable aéreo de Ciudad Bolívar para evitar accidentes en Bogotá

El país está conmocionado con la caída a más de 10 metros de altura de una cabina de la línea K del Metrocable de Medellín, que dejó un hombre muerto y 21 personas heridas.  

“Una telecabina que bajaba desde ese sector, antes de entrar a Santa Lucía, se golpea con otra cabina, aún no sabemos por qué se da ese golpe, y eso es lo que genera la caída”, afirmó este miércoles Tomás Elejalde, director del Metro de Medellín. 

Aunque las causas aún son materia de investigación, entre los ciudadanos surgió la duda de cómo es el tratamiento de estos cables aéreos tanto en la capital antioqueña como en otras ciudades. En Bogotá, por ejemplo, ya existe este medio de transporte en Ciudad Bolívar y se están construyendo más líneas en San Cristóbal y Potosí.

Tras el acontecimiento, TransMilenio informó que el cable del sur de la ciudad “cuenta con un sistema de control robusto, sensores redundantes que monitorean el funcionamiento de todos los componentes y un sistema de alta precisión en estaciones y torres que monitorean en todo momento el paso de cabinas y su comportamiento ante condiciones climáticas o externas”. 

TransMiCable también cuenta con una ejecución constante de las actividades de mantenimiento por parte del operador, que siguen las exigencias del fabricante y normas correspondientes

Añadió que, de presentarse diferencias en la medición de cualquier parámetro, el sistema activa las alertas de manera preventiva para que se realice una verificación de la condición y así garantizar la seguridad de los usuarios.

“TransMiCable también cuenta con una ejecución constante de las actividades de mantenimiento por parte del operador, que siguen las exigencias del fabricante y normas correspondientes”, añadió la empresa.

Cabe resaltar que el sistema TransMiCable cuenta con 3,25 kilómetros de cobertura, 4 estaciones, 163 cabinas y tiene un promedio de 638.000 validaciones mensuales, lo que equivale a 24.000 validaciones en un día hábil.

Así es el tratamiento del TransMiCable

En el contrato interadministrativo 2671 de 2023 entre TransMilenio y La Rolita, entidad que opera el cable en Ciudad Bolívar, se determina que es obligatorio el permanente cumplimiento de las normas europeas de calidad para este tipo de sistemas. 

Además, el operador (La Rolita) debe mantener un Software especializado de Gestión de Mantenimiento Asistido por Ordenador (GMAO) o Software Especializado de Mantenimiento, que podrá ser solicitado por TransMilenio en cualquier momento.

El contrato también describe las actividades de monitoreo y mantenimiento del cable, las cuales pueden ser diarias, mensuales, anuales o cada ciertos años. 

En el caso de las revisiones diarias, se debe realizar un recorrido de prueba para verificar el buen funcionamiento de los apoyos de los cables; la ausencia de obstáculos sobre las estructuras de línea; el estado y la ausencia de irregularidades evidentes o de daños en todos los vehículos; la ausencia de modificaciones del entorno tales como caída de piedras y aludes, entre otro puntos. 

Por otro lado, cada mes el operador evalúa aspectos como las uniones entre cables (empalmes); la posición recíproca de los cables y de los rieles en las zonas de acoplamiento y de desacoplamiento; la entrada, salida y el paso de los vehículos en la estación y los frenos y sus guarniciones.

En el documento también se habla de una revisión anual más profunda de todos los aspectos: construcciones de obra civil, dispositivos mecánicos, dispositivos eléctricos, dispositivos de seguridad, de vigilancia y de señalización y los vehículos. 

Algunos elementos tienen que cambiarse, aproximadamente, cada cinco años, por lo que debe realizarse incluso el cierre del sistema. Hace un año, en junio de 2023, se deshabilitó el servicio precisamente por este mantenimiento. 

Quejas de los usuarios por constantes paradas

Varios usuarios del TransMiCable han denunciado que el sistema los últimos meses ha comenzado a parar en varios puntos del recorrido, el cual habría pasado de demorarse 13 minutos a tardar media hora o más. 

Las paradas que se generan en la operación del sistema TransMiCable, cuyo lapso de tiempo oscila alrededor de 30 a 45 segundos, corresponden al distanciamiento de salida de las cabinas en la Estación Manitas

De hecho, La Rolita recibió esta queja de un ciudadano anónimo, quien afirmaba que el TransMicable “se paraba a cada rato”. La operadora distrital le respondió el pasado 20 de junio, afirmando que es un tema que está en estudio. 

“Las paradas que se generan en la operación del sistema TransMiCable, cuyo lapso de tiempo oscila alrededor de 30 a 45 segundos, corresponden al distanciamiento de salida de las cabinas en la Estación Manitas, razón por la cual se están generando mesas de trabajo entre La Rolita, TransMilenio y el fabricante Doppelmayr, para generar un funcionamiento óptimo del sistema”, indicó en la respuesta. 

Además, dijo que las otras causas por las cuales se pueden generar detenimientos en el sistema corresponden a motivos como: alerta de tormenta eléctrica cerca al sistema (reportada por un software denominado Biral), ingreso de personas con discapacidad a las cabinas, cambio de cabinas, entre otros. Este tipo de paradas oscilan entre 1 y 5 minutos.

“Cuando se realiza este tipo de detenimientos, se hace la activación del protocolo de comunicaciones, en el cual al interior de las cabinas se activa la comunicación máximo 5 minutos después de la detención”, añadió.

LAURA VALENTINA MERCADO

REDACCIÓN BOGOTÁ