Un repartidor de origen latino que trabaja en Dallas, Texas, reveló la cantidad de propina que recibió por un pedido. El joven, que se describe a sí mismo como un “ciudadano del mundo que trata de sobrevivir en Estados Unidos”, se dedica a hacer entregas en Uber Eats, y su experiencia captó la atención de muchos en las redes sociales.
El usuario, que publica en TikTok como @trankuz, comenzó su jornada de la forma habitual al aceptar pedidos a través de la aplicación. Sin embargo, ese día tomó un giro inesperado. “Me acaba de llegar una orden de 88 bebidas de Fat Straws”, mencionó en su video. El destino del pedido era un servicio de catering, ubicado a unos 16 kilómetros de distancia, y el costo del envío era de solo 12 dólares.
La expectativa del latino aumentó cuando se dio cuenta del valor total del pedido: US$700. Con la esperanza de recibir una propina del 10%, como es común en algunos casos, se dispuso a completar la entrega.
Al recoger las 88 bebidas en Fat Straws, el repartidor recibió un pequeño obsequio por la espera: un frappé, lo que ya hacía su día un poco mejor. Después de recorrer los 16 kilómetros y entregar el pedido, llegó el momento de la verdad.
Tras cerrar la orden en la aplicación, revisó el monto de la propina. “Se van a quedar locos”, anticipó. Con gran sorpresa, descubrió que el cliente había dejado una propina de US$107,05, más los US$12 iniciales por el envío. “El cliente aumentó el monto extra después de la entrega”, le notificó la empresa. En total, en el resumen de su entrega le figuró que había ganado US$111,06 por ese envío.
Esta experiencia fue una agradable sorpresa para el joven latino. En otro de sus videos, compartió una situación similar, pero con un resultado muy diferente. En esa ocasión, tenía que entregar 28 artículos, también de Fat Straws, pero la propina fue significativamente menor. “A pesar de que era un pedido de catering, no cerró en nada, nada de más”, mencionó. El pago total por esa entrega fue de US$28,75, con un monto extra de solo US$2,38.
La variabilidad en las propinas es una realidad constante para los repartidores. Aunque algunas aplicaciones tienen un precio de envío estipulado, el monto extra se convierte en una parte crucial para sus ingresos. En muchas ocasiones, estas son la diferencia entre un buen y un mal día de trabajo.
Uber, con sede central en San Francisco, representa una buena oportunidad laboral para los migrantes, ya que permite a un recién llegado a ese país disponer de un ingreso casi al instante por su fácil acceso. También es una buena opción para quienes desean generar dinero complementario al de su trabajo estable.
Los requisitos son pocos. En primer lugar, todos los inmigrantes que quieran trabajar en Uber deben tener una identificación llamada Social Security Number (SSN, por sus siglas en inglés) o Número de Identificación Personal del Contribuyente (ITIN, por sus siglas en inglés), así como cumplir con las especificaciones de transporte.
LA NACION
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