El Gobierno cubano ha anunciado que el próximo viernes llegará un buque de la Marina Real Canadiense.
Cientos de cubanos y turistas hicieron cola el jueves por la tarde para embarcar en la fragata rusa Gorshkov, que forma parte de la flota de guerra que ha realizado maniobras militares en el Atlántico.
Las autoridades cubanas y rusas acordaron permitir el acceso de los ciudadanos a este buque insignia que ha llegado acompañado por el submarino de propulsión nuclear Kazan y otros dos buques logísticos, así como el petrolero Pashin y el remolcador de salvamento Nikolai Chiker.
La cola siguió creciendo a lo largo del día aunque no se permitió el acceso al submarino situado a pocos metros. Niños, mujeres y hombres de todas las edades esperaron su turno y pasaron el control de seguridad.
La posibilidad de embarcar en buques de distintas nacionalidades que llegan a la bahía de La Habana es bastante habitual. La semana pasada, el Gobierno cubano anunció que el próximo viernes llegará un buque de la Marina Real Canadiense.
En cuanto a la flota rusa, las autoridades cubanas confirmaron que estará atracada en La Habana hasta el 17 de junio.
El Ministerio de Defensa ruso informó de que los ejercicios realizados por su flota tenían como objetivo simular ataques con misiles contra otros buques y objetivos situados incluso a más de 600 kilómetros de distancia.
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