El precio del dólar sobrepasó los 4.000 pesos en Colombia: ¿a quiénes beneficia y quiénes pierden?

El dólar tuvo un máximo en lo que va de año. La Tasa Representativa de Mercado (TRM) se ubicó en 4.023,26 pesos, excediendo la barrera de los 4.000 pesos que no se superaba desde el 6 de diciembre del 2023. Economistas de distintas entidades financieras repasaron los motivos que llevaron a este precio e hicieron un balance de los sectores beneficiados por la divisa.

A las horas de la mañana de la jornada de hoy, la moneda estadounidense se estaba transando a un precio promedio de 4.099,81 pesos, lo que representa una ganancia de 76,55 pesos respecto a la tasa oficial. De hecho, en un punto de la jornada, el dólar llegó a un máximo de 4.150 pesos.

Según especialistas, existen varios factores que determinan las fluctuaciones en la divisa estadounidense: la inflación y los diferenciales de tipo de interés, la deuda pública nacional, la relación de intercambio, el crecimiento económico, la incertidumbre y los déficits de cuenta corriente – registro de todas las transacciones de Colombia con el resto del mundo; ofrece perspectivas de qué tan competitivo es el país -.

Para Juan David Ballén, director de análisis y estrategia en Casa de Bolsa, en este caso, la subida del dólar se debe a factores inflacionarios: “El dólar hoy se está fortaleciendo en toda Latinoamérica porque la inflación en Estados Unidos descendió más de lo esperado, lo que genera la expectativa de que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) recorte al menos una vez la tasa antes del cierre de este año”.

En la misma línea está Daniel Velandia, director de investigaciones y economista jefe de Credicorp Capital, quien argumenta que el reajuste de las expectativas de política monetaria en el país norteamericano, y la incertidumbre que esto ha generado, han llevado a un fortalecimiento de la moneda.

Pero, además, añade dos elementos que han tenido efecto sobre la divisa. Por un lado, el “efecto contagio” que se generó por las recientes elecciones en México y las mayorías logradas en el Congreso por la presidenta electa, Claudia Sheinbaum: “cuando las dos economías más grandes de la región, como lo son México y Brasil, tienen eventos de riesgo y de incertidumbre política, hay un efecto contagio, pues los mercados están correlacionados y todas las monedas latinoamericanas, incluyendo la colombiana, han tenido un impacto importante recientemente”.

El otro punto es el factor de la incertidumbre doméstica, influenciada por “la discusión de si va a haber o no a cambios constitucionales y, en particular, el mayor ruido fiscal, han tenido un impacto en el precio del dólar”.

“Hay una preocupación por el tema fiscal. Hace unas semanas el Ministro de Hacienda planteó la posibilidad de modificar la regla fiscal para el próximo año. De igual forma, el tema del recorte de 20 billones, que no necesariamente está escrita en piedra, genera preocupación. Se espera que el marco fiscal de mediano plazo, que se va a publicar mañana, despeje las dudas que se tienen”, explicó Andrés Langebaek, director de estudios económicos de Grupo Bolívar.

¿Quién gana y quién pierde?

Bajo este contexto, las inversiones denominadas en dólares son las que se ven más beneficiadas, según dice Ballén. Algunos ejemplos de este tipo de activos son acciones en empresas multinacionales, metales preciosos o bonos en dólares.

Por su lado, Velandia dice que los exportadores son de los grandes ganadores de esta subida del dólar, pero, particularmente, aquellos que exportan bienes agrícolas, porque no necesitan importar tantos insumos de mercados internacionales, lo que economiza su producción. Café, banano y flores son algunos de los productos que se fortalecen bajo este paradigma. El sector petrolero también se beneficia por el fortalecimiento de esta divisa por “el mayor valor del petróleo en pesos colombianos”.

Por el contrario, el sector importador tiende a verse más afectado porque se aumentan los costos, especialmente la industria, que ya desde hace un tiempo viene con afectaciones.

Para César Pabón, director ejecutivo de Investigaciones Económicas de Corficolombiana, los consumidores también se verían golpeados por un aumento en el precio de los productos electrodomésticos, celulares y demás elementos del día a día.

De hecho, los analistas resaltan que hay un riesgo porque, si el dólar se mantiene muy alto por mucho tiempo, se puede generar presiones inflacionarias que afectaría principalmente a los hogares de menores ingresos y podría impedir que el Banco de la República continúe con la disminución de las tasas de interés.

“Los productos importados, que pesan cerca de un 15 por ciento de la canasta básica, empiezan a aumentar sus precios, y esto, naturalmente, puede tener efectos sobre la inflación”, dijo Pabón.

Sin embargo, esto se ve compensando por aquellos que reciben remesas, que, según Velandia, son casi el 3 por ciento del PIB. Estos se ven beneficiados por un aumento en valoración de las transferencias que los hace recibir mucho más en la moneda local.

Invertir en este contexto depende de varios factores; es necesario tener en cuenta el perfil de riesgo, la cantidad de activos, condiciones económicas, entre otros factores. Pero, en general, los analistas insisten en que es recomendable, para quienes puedan hacerlo, tener activos en dólares para generar diversificación.

“Tener activos en dólares es una excelente fuente de diversificación. Todos los portafolios, en la medida de lo posible, deberían tener activos atados a dólar para diversificar las monedas y para tener menor exposición al riesgo local”, dijo Velandia.

De la misma forma piensa Langebaek, quien dice “que en los portafolios de ahorro hay opciones que siempre permiten combinar activos locales con activos extranjeros y eso es una práctica adecuada”

Finalmente, para Pabón, el aumento de dólar puede ser una oportunidad para traer ingresos extraordinarios a Colombia, ya que el país se vuelve más atractivo para inversionistas internacionales y para los turistas, en la medida en que, para ellos, es más económico gastar en Colombia.

JUAN ANDRÉS BELTRÁN TÉLLEZ – Redacción Economía y Negocios

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