Entre gritos, acusaciones e insultos, la audiencia judicial por la entrega de alimentos que ayer cruzó al dirigente social Juan Grabois con la representante legal del ministerio de Capital Humano, Leila Gianni, terminó en un verdadero escándalo. Tanto que el episodio casi que termina en violencia física cuando el referente de Patria Grande avanzó sobre Ariel Romano, abogado de Capital Humano, y la funcionaria quiso empujar a Grabois. Todo ocurrió en un pasillo del edificio de los tribunales de Comodoro Py, donde antes habían expuesto frente a los camaristas federales Martín Irurzun, Eduardo Farah y Roberto Boico.

Al cabo de una audiencia caliente (que estuvo varias veces al borde de la suspensión), la pelea siguió a la salida de la Cámara. En un video que se volvió viral, se ve cómo Grabois le recuerda a Gianni que fue “kirchnerista, macrista, massista y ahora mileísta. No tenés credibilidad”, para después sorprender con un “cuca ladrona” y advertirle por una paradoja simbólica: “Tenés un pingüino tatuado y un león en la remera”. En efecto, la funcionaria llevaba una prenda negra con el dibujo de un león estampado en blanco.

Sin quedarse atrás, Gianni le retruca que el “ladrón” es él e ironiza: “Al pingüino se lo comió el león”. También reprocha: “Dejá de extorsionar gente mandándolos a los actos por una bolsa de comida” y remata con un “tarado”.

No solo contra Gianni dispara Grabois. También le apunta a Romano: “Chanchín, ¿qué te pasó a vos que te tiene que defender Leila?”, lo provoca y aclara: “Vos sos un cerdo moral e intelectual, no físicamente. Sos una mierda que le saca la comida a los pobres”.

De fondo, se escucha a Gianni gritar “deja de robar chorro”. A lo que Grabois insiste: “La chorra sos vos”.

Fue el corolario de un enfrentamiento que se había desatado ya en la sala de audiencias. Ante los camaristas, Gianni apuntó primero contra el juez Sebastián Casanello; pidió revertir la orden para que el Gobierno entregue un plan de distribución de alimentos y aseguró que el magistrado se excedió en sus funciones. “No vamos a permitir que ningún juez y menos aún con competencia penal nos diga cómo administrar una política pública”, dijo y que, en todo caso, la causa de los alimentos acopiados en depósitos podría correr en el fuero contencioso administrativo. Insistió además en que “no hay delito” porque la comida no estaba vencida.

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A su turno, Grabois aseguró que “acá hay delito. Lo reconoció el propio Ministerio. Por eso echaron a un funcionario”, recordó aludiendo a la salida de Pablo De la Torre de la Secretaría de la Niñez y pidió a los jueces “que Dios los ilumine”.

“Se está excediendo”, interrumpió Gianni. Cuando el dirigente le pidió que se callara, ella lo desafió: “No me faltes el respeto o la seguimos afuera, ¿o no te da la nafta?”. Poco después la audiencia sería levantada y el pasillo de tribunales se convertiría en auténtico ring verbal que por poco pasa a mayores.