¿Mereció el indulto el toro de Santiago Domecq? Esa es realmente la pregunta de la tarde y de la Feria de Julio. ¿Ha sido el mejor toro que se ha lidiado últimamente en la plaza de toros de València? En la muleta, diría que sí. Pero también me acuerdo de «Leguleyo» y de «Horroroso», dos toros de Jandilla lidiados en Fallas años atrás para los que también se pidió el indulto con fuerza y la autoridad puso cordura en una plaza de la categoría de València.

Pero la realidad es que ayer, mientras la tarde se precipitaba al fracaso una vez más, saltó en cuarto lugar «Escondido», herrado con el número 9, negro listón de capa, nacido en septiembre de 2019 y de 545 kilos de peso. Y la suerte le sonrió a Román y firmó la faena de su vida con la bravura suprema del ejemplar de la divisa jerezana.

Y es que Santiago Domecq, que regresaba a València después de 18 años, aparecía en el calendario como una bombona de oxígeno en el empinado camino que había emprendido la Feria de Julio, sobre todo, por los toros presentados estos últimos días. Era como un grito sobre la angostura de los muros de un ciclo muy pobre hasta ese momento. Así que había algo a lo que aferrarse en ese contrapunto metafísico que supone la memoria de lo vivido y la esperanza de lo que viene como clave en el plato fuerte del serial. La verdad, ni cartel de figuras ni corridas mixtas, un mano a mano con relato, con todas las de la ley, con el vértigo ritual prendido de cada uno de los dos toreros.

Así que Paco Ureña y Román cruzaron, casi sin indulgencia, el laberinto cerrado de su plaza para lidiar la divisa de la gloria, la más laureada del último año, guiados ambos por la radical constitución orgánica de su obra hecha en València estos años –especialmente en 2024-, bajo un mar de recuerdos y conjeturas que los volvía a unir en un cartel, tal y como ocurrió en la misma feria de 2018.

El comportamiento del toro

Y apareció «Escondido» en el ruedo, un animal fino de hechuras y con buena expresión que no podía fallar. Su comportamiento en el caballo fue justo, aunque ahí ya derrochaba las virtudes que luego le perdonarían la vida. Entró humillado y largo al segundo puyazo. Y en banderillas también se hizo dueño del corral tras mostrarse encastado y apretando en cada embroque a los rehileteros.

Así que «Escondido», como digo, transmitió desde el primer momento en la muleta del torero de Benimaclet, que brindó al público su labor. En la muleta, la embestida del ejemplar de Santiago Domecq fue incansable: metía la cara con exigencia y codicia, hacía literalmente el avión y llevaba el hocico humillado y profundo hasta donde lo llevaba el poder de Román. Porque había que poderle en todo momento, sí, debido a la casta encendida de su excepcional condición.

Así embistió “Escondido”

Y Román se acordó de aquel muletero poderoso que fue César Rincón y ofreció generosidad y corazón a aquel torrente de bravura que se le venía con todo a su muleta. En definitiva, su faena fue un himno que elevaba su nombre al Olimpio de los triunfadores del año. Bordó el toreo sobre ambas manos, con estética y valor, pasándoselo muy cerca en las tandas por uno y otro lado. Pero para aguantar esa embestida había que tener un valor hecho sobre hormigón armado y no de mampostería. Y así, Román dignificó su verdad. O la raíz vital sobre la que se fundamenta su tauromaquia. Y también la verdad de «Escondido», otro toro de la gloria. La entrega de ambos fue máxima. Y el capítulo resultó conmovedor, de mágica belleza. El resto de la tarde del valenciano fue todo entrega, no perdonó un quite ni se dejó nada en el tintero. Pero los aceros no le funcionaron. Y, además, invitó al sobresaliente Dias Gomez a firmar un quite precioso por delantales.

Eso fue lo más destacado de una tarde en la que Ureña se mostró puro y dejó detalles de calidad en sus tres toros, pero los aceros no viajaron con acierto. Román se marchó por la puerta de la gloria tras perdonarle la vida a «Escondido», un toro de la gloria de Santiago Domecq. Histórico.

[
,
, Toros Valencia 2024, roman, torero, indulta, escondido, toca, gloria, Santiago Domecq ganaderia, Toros, Toro, Mar, la Ley, plaza de toros, tauromaquia, Crítica taurina, Espectáculos taurinos, Festejos taurinos, Feria taurina, actos taurinos, Toros Valencia, Entrada de Toros, plaza toros, Toros Feria de Julio, corridas de toros

Por Diario

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *