Sólo un día después de ser imputada por corrupción, Begoña Gómez ha reaparecido en un acto público del PSOE. Ha sido en un mitin de Pedro Sánchez y Teresa Ribera en Benalmádena (Málaga) y en el que la esposa del presidente del Gobierno se ha convertido en la protagonista. "Gracias por estas aquí con Begoña", ha agradecido el líder del PSOE Andaluz, Juan Espadas, que ha elogiado al matrimonio "por dar a una lección a todos los de la palada de fango".

En ese momento, el público se ha puesto a corear: "Begoña, Begoña, Begoña". La mujer de Pedro Sánchez no es una habitual de los mítines del PSOE. La última vez que apareció en un acto fue en el cierre de campaña de las generales, celebrado en Getafe, donde fue llamativa su pin de "Perra Sánchez". Begoña Gómez ha hecho una excepción y, justo cuando su nombre está en el ojo del huracán, ha reaparecido vestida de rojo en la ciudad malagueña.

Ambos se han cogido de las manos y han estado muy unidos durante las intervenciones de los teloneros. Hasta el candidato de los socialdemócratas a la presidencia de la Comisión, el luxemburgués Nicolas Schmit, ha condenado en inglés "el acoso a la familia" de Sánchez. "Pedro, estamos contigo. Toda nuestra solidaridad contigo y con Begoña", ha expresado ya en español.

También la candidata del PSOE a las europeas y vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, ha rescatado el grito de la Guerra Civil "¡No pasarán". Durante su intervención ha puesto al mismo nivel a Begoña Gómez que a la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, por "ser mujeres valientes que saben que merece la pena defender nuestros derechos" y que "no nos los van a quitar".

Sánchez, desde el corazón

El secretario general del PSOE ha agradecido las muestras de apoyo. "Os voy a hablar desde el corazón", ha terciado Sánchez que ha agradecido "la solidaridad de la gran familia socialista". "Os lo agradecemos Begoña y yo", ha añadido en cuanto que ha arrancado la intervención. En el mitin no faltaron algunas menciones a otros casos de corrupción del PSOE".

Tampoco hemos sido, ni soy el primer presidente del Gobierno socialista que ha sufrido, ni ha sido objeto de ese ataque", ha terciado Sánchez que ha puesto de ejemplo a la exministra de Fomento, Magdalena Álvarez, condenada a nueve años de inhabilitación por el delito de prevaricación en el caso de los ERE fraudulentos de la Junta. "Exministra malagueña, ella sufrió el vil ataque de la derecha y la ultraderecha durante muchos años", ha asegurado Sánchez, obviando su condenada.

Según el presidente del Gobierno "hay un hilo, un nexo de unión entre Feijoo, Abascal, Alvise, las asociaciones ultraderechistas de Manos Limpias, Hazte Oír y toda la máquina del fango" y ese propósito es "derribar al gobierno". Sánchez ha pedido "el voto masivo de todos los zurdos y zurdas, para que gane el avance social y la política limpia". En tono épico, ha pedido derrotar "la agenda reaccionaria de la internacional ultraderechista" en la que ha incluido a Feijóo, Abascal, Milei y Orban.