Entre enero y mayo de 2024, los establecimientos del Ministerio de Salud del Perú (Minsa) atendieron 7.474 casos de demencia, de los cuales 4.705 (63 %) corresponden a mujeres y 2.769 (37 %) a hombres.
El aumento de casos de demencia y otras enfermedades neurodegenerativas en nuestro país es notorio en comparación con el año pasado. Durante 2023 se registraron 16.260 casos, de los cuales 10.259 afectaron a mujeres y 6.011 a hombres. A su vez, esta cifra representó un incremento del 24% en comparación con 2022, cuando se atendieron 13.116 casos en ese año.
Entre los tipos de demencia, la enfermedad más común es el Alzheimer, cuya etapa inicial es asintomática, ya que los signos se manifiestan cuando la persona afectada se encuentra en el estadio final y sufre de la pérdida total de autonomía para realizar sus actividades diarias. Por eso es importante tener en cuenta que existen ciertos factores de riesgo que aumentan la predisposición a desarrollar Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas.
El término demencia se utiliza para describir un conjunto de síntomas que afectan la memoria, el pensamiento y las habilidades sociales.
La demencia no es una enfermedad específica, sino que puede ser causada por diversas condiciones.
De acuerdo a Mayo Clinic, la demencia suele implicar la pérdida de memoria, que a menudo es uno de los primeros síntomas. Cabe señalar que la enfermedad de Alzheimer es la causa más común de demencia en adultos mayores.
Entre los tipos de demencia, destacan las de carácter progresivo, es decir, cuyos síntomas empeoran con el paso del tiempo como los siguientes:
- Enfermedad de Alzheimer: es la causa más común de demencia. En las personas con Alzheimer, se observan placas y ovillos en el cerebro que dañan las neuronas cerebrales sanas y las fibras que las conectan.
- Demencia vascular: este tipo de demencia se debe al daño en los vasos que suministran sangre al cerebro. Los problemas en los vasos sanguíneos pueden provocar accidentes cerebrovasculares o afectar el cerebro de otras maneras, como dañando las fibras de la sustancia blanca cerebral.
- Demencia con cuerpos de Lewy: se caracteriza por acumulaciones de proteína en forma de globo, conocidas como cuerpos de Lewy. Estas acumulaciones se han encontrado en los cerebros de personas con demencia con cuerpos de Lewy, enfermedad de Alzheimer y enfermedad de Parkinson. Es uno de los tipos más comunes de demencia.
- Demencia frontotemporal: incluye a un grupo de enfermedades caracterizadas por la degeneración de las células nerviosas y sus conexiones en los lóbulos frontal y temporal del cerebro. Estas áreas están relacionadas con la personalidad, la conducta y el lenguaje.
Entre los síntomas más comunes de la demencia, a nivel cognitivo y psicológico se encuentran los siguientes:
Síntomas cognitivos:
- Pérdida de la memoria, generalmente notada por terceros.
- Dificultades para comunicarse o encontrar palabras.
- Problemas con habilidades visuales y espaciales, como perderse al conducir un auto.
- Dificultades para razonar o resolver problemas.
- Problemas para realizar tareas complejas.
- Dificultad para planificar y organizarse.
- Mala coordinación y control de los movimientos.
- Confusión y desorientación.
Síntomas psicológicos:
- Alteraciones en la personalidad.
- Depresión.
- Ansiedad.
- Agitación.
- Conducta inapropiada.
- Desconfianza, conocida como paranoia.
- Ver cosas que no son reales, conocidas como alucinaciones.
Si bien el riesgo de sufrir demencia aumenta a partir de los 65 años, puede presentarse también antes de ser un adulto mayor.
Existen varios factores de riesgo que predisponen al desarrollo de Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas. Se trata de comportamientos relacionados con el estilo de vida que pueden ser cambiados para prevenir así la demencia. Entre ellos destacan los siguientes:
- Dieta y ejercicio: las personas que siguen una dieta de estilo mediterráneo rica en frutas, verduras, granos o cereales enteros, frutos secos y semillas tienen una mejor función cognitiva.
- Consumo excesivo de alcohol: el consumo de alcohol está vinculado a un mayor riesgo de demencia, en particular a la demencia de aparición temprana.
- Factores de riesgo cardiovascular: como la obesidad, la presión arterial alta, el colesterol alto y la acumulación de grasas en las paredes arteriales (ateroesclerosis), la diabetes y el tabaquismo.
- Niveles bajos de ciertas vitaminas: la deficiencia de vitamina D, vitamina B6, vitamina B12 y folato pueden aumentar el riesgo de sufrir demencia.
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