Fuentes consultadas por ESPN señalaron que hay un acuerdo de palabra entre ambas partes para la justa mundialista
CIUDAD DE MÉXICO — Los representantes del Estadio Azteca garantizaron a los titulares de palcos que tendrán acceso al inmueble durante el Mundial 2026, a unos días de iniciar la remodelación, de acuerdo a fuentes consultadas por ESPN, cercanas al recinto.
En una reunión que tuvo lugar en el Estadio Azteca, los representantes del inmueble le garantizaron a los titulares de palcos que tendrán acceso al Mundial 2026 y que las modificaciones a sus locaciones serán mínimas.
A los titulares de los más de 800 palcos del Estadio Azteca ya se les pidió que retiren sus pertenencias a más tardar en 10 días hábiles, debido a que el inmueble será cerrado por 18 meses, que es el tiempo que tardará la remodelación.
“Durante ese tiempo, el Estadio permanecerá cerrado sin posibilidad de ingresar a ninguna parte del mismo, incluidos palcos y plateas, conforme a lo establecido en los diferentes permisos otorgados por las autoridades”, se lee en el comunicado que les hicieron llegar a los titulares de palcos.
Los palcos que necesitaban ser reubicados o debían tener una remodelación mayor, ya llegaron a un acuerdo individual con el Estadio Azteca, para que las obras se realicen sin ningún contratiempo.
Prometen firmar el acuerdo en junio
Una vez garantizado el acceso de los titulares de palcos al Estadio Azteca, para el Mundial 2026, y a dos años de inaugurarse el evento en ese recinto, se prometió que un acuerdo por escrito sería firmado en los próximos días.
El acuerdo deberá tener el aval de la FIFA, en el que se respete el derecho que tienen los titulares de palcos, de entrar a todos los eventos del Estadio Azteca sin costo, durante cien años.
Las láminas de la remodelación del Estadio Azteca ya se encuentran en el inmueble y se calcula que reabra en diciembre del 2025 o en enero del 2026, justo para las pruebas que se hacen antes de la inauguración de la próxima Copa del Mundo.
De acuerdo a las personas consultadas, se mantiene en pie el cambio de la ubicación del palco de prensa y los vestidores, bloqueando el acceso a la cancha que se tiene en una de las cabeceras y haciendo uno nuevo por el centro, como se tenía contemplado en los planos originales del Estadio Azteca.
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